"La belleza puede estar en la caída"
Andrés Nieva
entonces la vida debe ser por oposición un pasillo oscuro.
Afuera: un frío raro,
un frío que amagaba,
que no me dejaba tener frío.
Me pongo un pullover de rombos para equilibrar algún abrigo.
camino rapidito porque sé que llego tarde,
y entra agua, barro, pepinos, pasto,
todo lo que le dejo entrar por mi zapatilla negra y rota.
Adentro:
Un chico cálido con gusto a vainilla me saluda después de tanto tiempo,
y tomamos una cerveza que nos debíamos.
Las luces se bajan,
pero no suena a muerte ni a caída;
nos traen una vela y nos reímos,
y nos reímos de que nos reímos,
porque después de un largo rato el chico dice:
"ahora entiendo para que es la vela".
Afuera:
Un obrero intenta calentarse del frió porque lo han echado de su casa,
mañana labura temprano asi que duerme en la construcción;
definitivamente no le convenía tomarse el bondi.
Con los cuatro pesos que se ahorró de cospel más cincuenta centavos que se encontró tirado
se compra un tinto en el kiosco de la esquina.
Adentro:
Empieza algo así como una obra (de teatro)
Nosotros no la vemos,
o no la escuchamos,
Hablamos de Pierce y del terrorismo;
yo aprendo a decir bien la palabra : "chabacano".
Es todo tan intenso,
que me emociono;
para cuando giro los personajes siempre tienen otra ropa,
y los dos miramos anonadados a la gente que se ríe
(mucho)
Pienso que debe ser interesante porque lo veo a mi hermano en otra mesa que también se ríe,
y él no es persona de reírse por boludeces.
Pero no me importa;
porque hay cosas que pueden ser interesantes,
pero hay cosas de las que uno no puede dejar de hablar,
entonces prefiero las últimas.
Viene una chica me pide que lea.
Afuera:
El vino se le ha volcado en la ropa al obrero porque le temblaba la mano del frío,
mañana no estará impecable para el laburo,
pero por suerte eso en su ámbito no es relevante.
Adentro:
Leo un poema que no es mío,
todo por un capricho de no querer pronunciar la palabra "teta".
Otra poeta lee mi escrito y la gente de adentro también se rie (por eso).
Pienso que de pronto todo les da gracia,
pero también pienso que la chica lo leyó muy bien.
Afuera:
salimos afuera,
caminamos hasta una esquina y me acuerdo que el lunes me había enamorado de esa calle con farolitos y vereda,
vereda de las viejas,
de verdad.
Pienso en el hambre,
y paso por un 24hs.
una nena se me aparece y me pide que le compre algo.
Pienso en el poema,
me voy sin conceder el favor.
Adentro
(de mi casa):
tengo frío y me tapo con una colcha,
leo un par de poemas en una computadora
después de comer,
cuando cierro los ojos vuelvo a ver lo oscuro,
pienso en lo lindo de toda esa gente,
en el amor que no esperaba que me dieran
y me dieron,
pienso en que tengo que dormir,
en que no quiero pensar,
en que me empieza a salir bien.
Sin embargo cuando cierro los ojos,
todo esta oscuro ,
"el hombre es malo, aguante Hobbes"
es lo ultimo que pienso.
Después creo estar durmiendo,
o que todo esto haya sido un sueño.
Flor Lopez